martes, 28 de junio de 2011
Cometí muchos errores. Lloré por quién no debía y reí con falsas amistades, tropezé dos veces con la misma piedra y cuando pensaba que ya no lo haría más, me empujaron y caí estampada con la tercera. Perdoné mucho, demasiado, me callé te quieros que, por miedo o por inseguridad se quedaron por mucho tiempo en el aire. Hubo veces que me desperté con ganas de comerme el mundo y otras que parece que el mundo me comía a mi. Grité con fuerza, pero mi voz no siempre salía, y callé verdades por no hacer daño. Hay días que dormía solo para poder verte en mis sueños y días en los que no podia dormir. Abrazé a la persona que pensé que nunca me haría daño y me di cuenta de que esa persona no se merecía ni el roce de mi piel. Tuve la sensación de volar más alto que las nubes, en el lugar más insospechado. Me arrepentí de algunas cosas que cometí en mi vida, pero no me arrepiento de haber conocido a ciertas personas... Por que gracias a ellos, soy quien soy ahora. Agradezco a esas personas que me hicieron fuerte, a las que me lastimaron pensado que me tumbarían; pero lo que nunca se imaginaron es que yo puedes más que esos!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Excelente.
ResponderEliminar