domingo, 2 de octubre de 2011

Este es el último momento, en el que llorar es lo único que se me ocurre; no voy a tirar cosas como siempre hago para controlar lo que siento, hoy voy a disfrutar el dolor cuan grande sea como lo estoy sintiendo. Hoy, después de tanta ilusión que había en mi vida, vuelvo a decir que el dolor no se acaba en un día, hay que vivirlo aunque lastima, hay que soportarlo aunque arruine grandes momentos de mi vida, pero la única manera de superar el daño que me causaron, es desahogarme, sin intentar evitarlo. El amor no es de dos, siempre va a estar el error, en donde una persona se entrega sin temor, en donde una persona sincera siempre es engañada para lograr conocer el mundo en el que vive hoy. Esto duele pero tiene solución, con el paso de las horas y los meses se habrá borrado el sufrimiento de hoy, las cosas ya no van a ser así, y lo único que va a quedar por hacer es no mirar hacia atrás, la única buena opción es continuar y esperar que el verdadero amor te llegue a amar.
Cuando alguien sin conciencia no entiende lo que sentís, y con sus juegos tontos lastima aquello que procuras que sea hermoso y especial, no es necesario maldecir y preocuparte más, mejor sólo vive la continuación de la vida, con el tiempo vas a olvidar, y todo lo que al instante te hace querer morirte, mañana te va a hacer más fuerte para demostrar que no por culpa de un idiota ibas a caer derrotada sin lograr continuar. Mañana ya no va a importar lo que hoy estoy sintiendo, porque lo único que quiero es llegar muy lejos, sin pensar más en lo que podría dañarme, sin temer más a volver a enamorarme, porque este juego es así, ganar o perder, suerte hay que tener, y si no la tenés, sólo hay que disfrutar esos momentos de hermosura que te hacen bien, y en cada lágrima recordar que si te dañaron, eso te va a hacer más fuerte de lo que otros pueden imaginar. No es necesario condenarse a vivir en un mundo de agonía; mientras sufrís, esa persona esta llena de alegría. Llorar no es tan malo, pero no hay que hacerlo a cada rato, simplemente hay que aceptar que el amor trae ingenuidad, y cuando verdaderamente amás, te quedás ciega y fácilmente te pueden engañar.

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