Nada ni nadie podría suplantar tu presencia en mi vida.

Tu presencia en mi vida es una de las cosas más importantes que tengo. En todo momento estás a mi lado, acompañándome, ayudándome.

Si la distancia nos separara, haría todo lo posible para que volviéramos a encontrarnos, y si nos alejamos, siento que pierdo la mitad de mi. Sos mi complemento, la mejor compañía que tengo. Valorás en mi cualidades que yo no conocía, fortalezas que creía perdidas, aspectos de mi que, con tu ayuda, se renuevan. Tenía oculto todo eso o fuiste vos quien lo hizo surgir? Capaz no lo sepa nunca pero te agradezco que lo descubrieras.

Cuando tengas un problema, acordate cuántas situaciones similares compartimos y cómo las superamos. Vas a sentir que esa fortaleza te da ánimo para seguir adelante. Cuantas veces me diste fuerza vos para superar los problemas que surgían… Te pido que hagas lo mismo: cuando necesites apoyo para superar alguna tormenta, pedime ayuda y todo va a estar bien.

Ni la distancia ni el tiempo va a lograr separarnos. Nada va a hacer que te olvide o que sienta que no te necesito. Sos una persona única. Nos tuvimos que separar una vez, qué difícil el momento de la "despedida", el miedo de no tenerte cerca si te necesito. Pero todo se compensa en el reencuentro: volvemos a hablar de cada tema como si ni un día hubiera pasado.

A veces me pone mal no saber nada de vos durante un tiempo. Me es imposible ocupar ese vacío con otras personas u otras actividades. Espero tener siempre alguna novedad sobre vos. Necesito saber cómo estás, nunca dejes de comunicarte conmigo. Decime lo que quieras, pero nunca me dejes en silencio.

Vos y yo somos los dos pilares de un amor. 

A pesar del tiempo que pasa, siempre siento que hay una nueva persona por descubrir en vos… Me pasa muchas veces: interrumpo algo y pienso qué opinarías de ese asunto, como lo resolverías, si estarías de acuerdo conmigo. Nadie podría ayudarme más porque una sugerencia o una crítica tuyas son fundamentales para mi a la hora de tomar mis decisiones. Saber que podemos compartir todo sin pensar dónde estemos ni qué horarios o rutinas vivamos es algo especial.

Cuando dudo, tus palabras me ayudan a encontrar la mejor solución. Incluso tus silencios me hablan de lo que pensás. 

Sabés cómo hacerme reflexionar.

Tu historia siempre va a estar entrelazada con la mía. Conocés todo de mi. Y contándote sobre mi pasado, miramos hacia el futuro. Compartir lo que nos hizo sufrir y también eso que nos hizo ser felices nos da más ganas de seguir.

Te digo una vez más que, pase lo que pase, podés contar conmigo. Porque no importa dónde estés ni el tiempo que transcurra: vivís en mi corazón para siempre.