miércoles, 15 de febrero de 2012

olvidarte es más difícil que encontrarse al sol de noche.

Volvió a pasar, en realidad, nunca deja de pasar, lo supe ayer, lo se hoy, mañana también lo voy a saber, pero el problema es que aunque haya vivido la misma situación mil veces, yo no aprendo una mierda, porque siempre tiene un plus de diferencia, desde un mensaje de más, hasta una mirada más profunda, o palabras que jamás habías escuchado, o ilusiones nuevas, o la esperanza de que todo cambia... (es mentira, nada cambia)
Siempre algo logra convencerme, obviamente, tardo un poco más de tiempo, pero al fin y al cabo termino siempre igual.

A veces no entiendo porque “estoy triste”, porque mi situación actual es aparentemente perfecta pero… ¡NO! Esos sentimientos  “ocultos” están latentes, y cuando nos cruzamos me arruinan la vida. No lo quiero escuchar y lo escucho, hago mi vida, pero aparece, me encuentra, me busca, me vuelve loca. Olvidarte lo hice, pero te sigo queriendo. No se qué hago! Pasan los años y se sigue repitiendo esto, y yo, que no dejo de sentir, Me sorprendo a mi misma, que chica insistente soy; si estuvieras 5 minutos, va ni 5, solo un minuto en mi mente, te sorprenderías, realmente lo harías.

No tengo más ganas de eso, ya no tengo fuerzas de esto, mi estado anímico es muy débil en todos los sentidos, no quiero soportar estas cosas. CERREMOS LA HISTORIA! No puedo creer que yo diga esto, pero necesito ser feliz, quiero serlo, voy a buscar en Google, un remedio para arrancarte de mi, un brujo alguien me tiene que ayudar, y una reprogramación neurolingüística, y creo que con eso ya no te voy a reconocer.
MENTIRA, ni aunque fuera ciega dejaría de verte, porque te siento, incluso en una ciudad sin luz, podría sentir que te asomás, porque sos el único que me eriza la piel, y me produce escalofríos sin tocarme.

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